¿Por qué "Atenco no se olvida"?
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¿Por qué "Atenco no se olvida"?
15 MAYO, 2012
Por: Fernanda Villalpando, egresada en Ciencias de la Comunicación, en colaboración con Resu Rodríguez, Programa Institucional de Derechos Humanos y Paz.
En su reciente visita a la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, estudiantes increparon al candidato priista a la presidencia como nadie antes lo había hecho. Desenterraron lo que había permanecido dormido durante toda su campaña: Atenco, 2006. Entre los gritos de "Fuera, Fuera" y "Atenco no se olvida", los jóvenes le recordaron a la nación cómo durante el gobierno de Enrique Peña Nieto la población de San Salvador Atenco fue víctima de una serie de violaciones a los Derechos Humanos que ha sido documentada por distintas organizaciones, incluyendo Amnistía Internacional.
Atenco, 2006
El 3 de mayo de 2006, 8 floricultores intentaron poner sus puestos en las calles del mercado Belisario Domínguez, en Texcoco, tras haber llegado un acuerdo con las autoridades municipales. Sin embargo, varias decenas de policías estatales y municipales lo impidieron. Esto desató una protesta encabezada por miembros del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, quienes un año antes habían impedido la expropiación de sus tierras para la construcción de un aeropuerto y se habían unido al movimiento de La Otra Campaña.
La protesta fue reprimida con violencia por parte de los policías. Hubo un enfrentamiento en el que resultaron asesinadas dos personas, una de 14 años. Al día siguiente las protestas continuaron, y así la represión por parte del gobierno estatal y federal.
Allanamiento de moradas, golpizas, detenciones indiscriminadas, (incluyendo personas ajenas al movimiento), ataques a periodistas independientes y obstrucción de atención médica a heridos, son algunas de las violaciones a Derechos Humanos que fueron reportadas durante la refriega. De los cientos de detenidos, 47 fueron mujeres, de las cuales al menos veintiséis fueron violadas, golpeadas y vejadas durante su traslado al penal por los policías que las arrestaron. Es importante resaltar la responsabilidad del Estado ante las violaciones a los Derechos Humanos ocurridos en 2006, calificadas como "incidentes" por Peña Nieto quien, en su visita a la Universidad, asumió su responsabilidad sobre el uso de la fuerza pública en ese momento, para "restablecer el orden y la paz".
El caso de 11 mujeres que reportaron los abusos fue llevado a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en 2008 y aceptado en noviembre de 2011, pues "Ni la Fiscalía Especial de Delitos Violentos Contra las Mujeres y Trata de Personas (Fevimitra) ni la Procuraduría General de Justicia de Estado de México (PGJEM) han realizado una adecuada investigación y ningún policía de los más de 2,500 agentes que intervinieron, ha sido sancionado" afirmó el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez en una entrevista publicada por CNN en español.
Para haber sido aceptado el caso, la CIDH reconoce de antemano que sí existieron violaciones a los Derechos Humanos y se espera su resolución sobre la responsabilidad del Estado mexicano en ellas.
Ibero, 2012
La importancia del rechazo y los reclamos al candidato presidencial Enrique Peña Nieto empieza en el derecho a libertad de expresión que tienen los universitarios y va más allá. Visibilizaron que a poco más de seis años de Atenco, la impunidad no sólo ha dejado en la injusticia a las víctimas sino también ha llevado a la carrera presidencial a un presunto responsable.
Los estudiantes reflejaron que el México de hoy sí tiene memoria. Una memoria que no ha sido reflejada por los medios de comunicación corporativos, los cuales ya han tratado de minimizar lo ocurrido para cuidar a su candidato como héroe de telenovela.
La protesta contra Enrique ocurrida en la Ibero trajo de nuevo el caso Atenco a la agenda pública y planteó una pregunta con letras mayúsculas: ¿POR QUÉ?, ¿Por qué estudiantes de una universidad privada rechazan al candidato del PRI?, ¿Por qué Atenco no se olvida? ¿Por qué las jóvenes llevaban las manos pintadas de sangre?, ¿Porqué un ex gobernante responsable de múltiples violaciones a Derechos Humanos en el estado de México, es un candidato presidencial?
Es importante responder estas preguntas, más allá de los manejos partidistas y mediáticos que hicieron ver las voces de los universitarios como "agresivas", "infiltradas", "de una minoría" o "vergonzosas" y no propias de un espacio universitario. Lo propio de las universidades es el conocimiento y la responsabilidad que conlleva tenerlo, por lo que quedarse en silencio hubiera sido un acto de complicidad. La responsabilidad social llevó a los estudiantes a alzar la voz respecto de hechos dolorosos y violentos poco difundidos, y esto es un acto del que tenemos que aprender y no criminalizar.
Es cierto, sabemos que hacen falta muchas más acciones para respetar la verdad -justicia -paz en este país, que se trata de hacerlo en una cultura noviolenta y fortaleciendo la autonomía además de la denuncia. Esa es la gran tarea de todos, así como cuidar que los jóvenes no sean amenazados al ejercer su derecho a la verdad.