La lección de la pandemia es aprender a vivir en una sociedad incluyente y justa

Por Laura Rodríguez

Ni calzones rojos o amarillos, maletas o uvas.

La mejor manera de prepararnos para recibir el 2021 es hacer un balance de todo lo vivido en un año atípico, marcado por la pandemia de covid-19, y valorar qué se puede mejorar en lo personal, lo familiar y lo social con el objetivo de lograr una sociedad más incluyente y justa.

"Como sociedad no podemos seguir mirando solamente hacia el bien personal. Si algo en este momento nos ha puesto el covid en claridades es que esta humanidad no se salva sola. (No se salva) si no hacemos una red de soporte para aquellos que se han ido quedando en el camino porque perdieron el trabajo, porque hubo una persona que era fundamental para la situación familiar y murió o tuvo que cambiarse de ciudad, porque muchos dejaron de estudiar porque ya no había la situación económica. No es mirar hacia adelante en una posición individualista", explica Rosana Torres Esquivel, académica del Centro de Acompañamiento y Estudios Juveniles del ITESO.

De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud Jalisco al 17 de diciembre, en México han fallecido 116 mil 487 personas a causa del SARS-CoV-2 y se ha reportado el contagio de al menos 1 millón 289 mil 298. Esta situación, que ha tocado a la gran mayoría de los mexicanos, ha hecho que la realidad de la muerte sea una situación constante y cotidiana.

Es por ello que en este balance sobre lo vivido en el 2020 se deben reconocer tanto los duelos como como los proyectos, planes, metas o sueños truncados, así como las pérdidas económicas y familiares.

"La muerte nos pone a los seres humanos ante nosotros mismos y nos interpela, y en esa interpelación que nos da la realidad de la muerte es la realidad de la vida la que nos contesta. El covid nos ha permitido como humanidad pararnos en seco e interpelarnos sobre la realidad humana en la que estamos parados", agrega la psicoterapeuta de la Universidad Jesuita de Guadalajara.

Es a partir de esta realidad, que ha causado el aumento de casos de ansiedad y depresión, que es importante entender también qué actitud se tiene ante la vida y en relación con el mundo. Torres Esquivel señala que se pueden identificar tres tipos: la pesimista, que solo se fija en lo negativo y en lo que destruye; la cumplida y responsable pero que solo le abona a su proyecto personal, y la que de manera clara e intencionada trabaja en la construcción de un bien común.

Al respecto recomienda "reconocer nuevamente los recursos que ahorita tengo; reconocer cuáles son mis sueños a corto, mediano y largo plazo y desde ahí poder reconocer qué está en mis manos y qué no; agradecer lo que tengo y desde ese agradecimiento hacer el reconocimiento de lo que soy capaz".

El objetivo es lograr el reconocimiento de la humanidad y procurar una sociedad más incluyente, justa y equitativa.