Revisan el papel de las organizaciones de la sociedad civil
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Revisan el papel de las organizaciones de la sociedad civil
El ITESO es sede del cuarto Foro Anual de la Sociedad Civil Organizada, que en esta ocasión tiene como título "Desafíos y rutas para el impacto colectivo" y en el que se reflexiona sobre la importancia de innovar en el contexto postpandemia y ante la incertidumbre por la nueva miscelánea fiscal.
Édgar Velasco
Un grupo de muchachos se organiza para arreglar la cancha de futbol donde se reúne cada semana. Las y los vecinos de la colonia se ponen de acuerdo para hacer brigadas para limpiar las calles y reforzar la seguridad. Otro grupo se coordina en una asociación civil para resolver un problema específico de su comunidad. Esos son ejemplos de cómo la sociedad civil se puede organizar para trabajar a favor de su entorno y, sobre todo, en mejorar las condiciones de vida de otras personas. La labor de las llamadas organizaciones de la sociedad civil resulta indispensable para atender las diversas realidades sociales, y por eso es importante que, cada tanto, éstas se reúnan a reflexionar sobre su trabajo como ocurre en el Foro Anual de la Sociedad Civil Organizada, cuya cuarta edición tiene al ITESO como sede y es convocada por el Comité para el Fomento y la Participación de las Organizaciones de la Sociedad Civil del Estado de Jalisco.
Al dar la bienvenida a los participantes del foro, Catalina Morfín, titular de la Dirección General Académica del ITESO, señaló que la universidad es la casa de estas organizaciones "por la relación estrecha que hay con los integrantes de las organizaciones de la sociedad civil (OSC) y los vínculos de colaboración y amistad. Pero además porque hay coincidencias vitales entre su trabajo y el ser y el quehacer del ITESO".
Tomando como referencia el pensamiento de Boaventura de Sousa, explicó que hay tres retos para las OSC: "Primero, desarrollar un mayor quehacer intelectual, producir teoría que conciba la realidad como un campo de posibilidades. Segundo, trabajar en colaboración sin caer en el ver al otro como objeto, sino como un sujeto y crear alternativas a la realidad. Tercero, avanzar en la reconstrucción de la esperanza, fortalecer alianzas y estrategias. Hay que convertir a las OSC en motores críticos que motiven el cambio".
Juan Carlos Anguiano, subsecretario para el Desarrollo y Vinculación con Organizaciones de la Sociedad Civil de Jalisco, señaló que dichos colectivos se encuentran ante el escenario de "retos que vienen muy, muy complejos", entre los que subrayó los cambios fiscales propuestos por la Presidencia de la República, por ejemplo la eliminación de las deducciones de impuestos a donaciones filantrópicas. En ese sentido, Luis Aguirre, presidente del Consejo Jalisciense de Asistencia Social, hizo un llamado "a la colaboración para poder llevar de la imaginación a la realidad las tareas que se están llevando a cabo".
Magdalena Rodríguez Romero, presidenta del Comité para el Fomento y la Participación de las Organizaciones de la Sociedad Civil, destacó que las personas que participan en estos colectivos "somos personas que no nos conformamos con el mundo como está, sino que buscamos soluciones innovadoras para cambiar".
Tras las palabras de apertura, se realizó la primera mesa del foro, moderada por Carlos Peralta, académico del ITESO, y en la que participaron Laura Rochín, de Fundación Expo Guadalajara; Alberto Esquer, titular de la Secretaría del Sistema de Asistencia Social, y Magdalena Rodríguez.
Al hablar del escenario que enfrentan ahora las OSC, Rochín describió a estas organizaciones como "activas y resilientes", y destacó que en muchos casos la iniciativa privada prefiere canalizar sus apoyos a través de ellas porque "saben que el recurso y el beneficio se van a multiplicar".
Esquer señaló que desde su experiencia en el servicio público ha comprobado que "el gobierno no puede existir sin la sociedad civil organizada" y subrayó que es necesario "generar la confianza que se ha perdido entre el gobierno y las organizaciones".
Finalmente, Rodríguez señaló que si bien ha habido avances, es fundamental "consolidar la confianza de las personas para que nos conozcan".
Entre los desafíos, Rochín identificó que es necesario que las OSC "vendan mejor las causas", ya que, puso como ejemplo, ante el escenario de la desaparición de los estímulos fiscales muchos donantes están considerando dejar de hacer sus aportaciones, "lo que significa que no están convencidos de la causa". Esquer se refirió también a la importancia de que el trabajo sea transversal y, sobre todo, medible, mientras que Rodríguez señaló que es importante apostar "por un liderazgo colectivo, porque los problemas no se pueden resolver de manera aislada".
Para cerrar, los participantes hablaron de las oportunidades de desarrollo y hubo coincidencia en la necesidad de profesionalizar el trabajo de las OSC, acercarlas a la tecnología y establecer canales abiertos de comunicación.
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