Un campus sustentable con ayuda de la tecnología
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Un campus sustentable con ayuda de la tecnología
Profesores del ITESO presentaron los prototipos de aplicaciones y herramientas tecnológicas que utilizan para mejorar el medio ambiente en el campus.
Adriana López-Acosta
"El ITESO es el bosque universitario de Guadalajara. Contamos con 3,733 árboles de cerca de 254 especies diferentes, lo que nos hace uno de los lugares con mejor biodiversidad del Área Metropolitana de Guadalajara", afirmó Sergio Nuño, director de la Oficina de Servicios Generales del ITESO.
En Campus Party 2017, la sustentabilidad encontró en la tecnología un punto en común: el ITESO presentó a los "campuseros" los avances que han realizado para preservar el bosque universitario.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) proyecta que, para 2050, 70 por ciento de la población estará concentrada en ciudades. Este fenómeno llama a pensar en un mejor funcionamiento de las urbes para no agotar los recursos naturales.
El ITESO, al ser un microcosmos con sus propios recursos y habitantes flotantes, "permite ser laboratorio viviente, un living lab para medición de recursos como temperatura y humedad en sus árboles, o un espacio para experimentar con fuentes de energía alternativa", dijo Sergio Nuño.
Nuño y Luis Eduardo Pérez, profesor del Departamento de Electrónica, Sistemas e Informática (DESI), presentaron algunos de los proyectos ambientales que se valen de la tecnología.
Como parte del proyecto Jacaranda 83 se colocó un microchip en este árbol numerado del campus (ubicado en el jardín central), para medir sus niveles de humedad, temperatura y oxígeno. Hoy ya hay colocados 15 microchips.
También se ha realizado un proyecto con un dron para medir los niveles de clorofila en los árboles del campus. Esta información abierta se puede consultar por medio de aplicaciones que interpretan los datos.
En ciertos edificios, el campus utiliza paneles y calentadores solares para reducir impacto en uso de gas. Antes, se consumían 38,000 litros de gas anualmente. Hoy el ITESO consume 6,000. Además, se ha realizado el cambio de lámparas fluorescentes por focos LED y sensores de aire acondicionado.
El ITESO ha invertido esfuerzos en la reducción de su huella ecológica con los residuos. En 2008 prohibió la venta de unicel, y ahora la lucha va contra el PET y la eliminación de popotes. Con un sistema más sofisticado de separación de residuos reutilizables, el ITESO logró la apertura de una "cuenta verde", a partir de las ganancias de venta de PET, vidrio, desperdicios tecnológicos y cartón, para invertir en infraestructura y tecnología.
En cuanto a manejo del agua, la planta de tratamiento cuenta con sensores que ayudan a medir calidad del agua con fuente de alimentación con panel solar, para evitar toma de corriente.
La red de monitoreo de la calidad del aire en el ITESO ya se extiende al Área Metropolitana de Guadalajara, censando variables ambientales. "Con esto podemos generar un prototipo y extender a otras zonas de la ciudad. Ya hay cinco sensores colocados en el Bosque la Primavera para dar variables que permitirían tomar mejores decisiones", explicó Luis Eduardo Pérez.