Prepa ITESO

Abrió sus puertas en 2021 y en 2024 año egresó su primera generación. Tiene como objetivo formar a jóvenes que se comprometan con la construcción de una sociedad más plural, libre y justa, por medio de un modelo educativo integral en el que prevalecen la acción, la reflexión y la colaboración con las demás personas.

Su enfoque educativo busca formar alumnos y alumnas académicamente competentes, conscientes del mundo y con disposición a poner su ser y quehacer al servicio de la sociedad. Esto requiere un proceso de enseñanza y aprendizaje crítico, activo, participativo y flexible. Además, se articula con el Paradigma Pedagógico Ignaciano (PPI), el cual está situado en la realidad de las y los estudiantes para propiciar el diálogo entre los distintos saberes y promover así la transformación de la persona y del mundo.

Su plan de estudios cuenta con tres características diferenciadoras:

1. Humanismo e interdisciplinariedad
   Promueve una formación integral que no sólo abarca el desarrollo académico, sino también el crecimiento personal y social de los y las estudiantes. Al involucrar diversas disciplinas y perspectivas, se fomenta un aprendizaje más completo y enriquecedor, que permite comprender y abordar los problemas desde múltiples ángulos.
    
2. Basado en la realidad local, nacional y global
   La enseñanza del bachillerato parte de una lectura crítica y profunda de la realidad en todas sus escalas, así como de un análisis sobre los saberes y competencias que contribuyan a la solución de sus problemáticas.
    
3. Aprendizaje colaborativo
   Estimula la capacidad de trabajar en equipo y desde los enfoques de diversas disciplinas, con el fin de responder a las problemáticas del entorno mediante perspectivas más innovadoras y que dejen un aprendizaje más significativo.

La Formación de Prepa ITESO contiene los cuatro principios de la educación ignaciana:

Desde el área de Formación Ignaciana se ofrece el nodo Identidad, Diversidad y Comunidad, donde se analizan y problematizan las crisis socioambientales en escalas global, nacional y local, identificando sus causas y consecuencias. Con esta perspectiva crítica se busca que las y los estudiantes sean conscientes de las estructuras que perpetúan estas crisis en el mundo y, desde una mirada compasiva, se dejen interpelar por la situación de las personas y los lugares afectados. La experiencia se percibe como un eje central, permitiendo que el estudiantado adquiera una apertura hacia la realidad, formule sus propios juicios y afirmaciones, transmita teorías y conceptos y emplee diversas formas de nombrar y definir la realidad.