Las ideas más importantes llegan desde la transdisciplina

Montserrat Muñoz

Con una propuesta formal para la construcción de la Red Internacional Edgar Morin, obra abierta para la humanidad (Red EMOH), iniciativa que incluiría a estudiosos de la obra del pensador francés provenientes de todo el mundo para difundir, reflexionar y continuar la obra de Morin, finalizó el Seminario Internacional Universidad, Pensar y Actuar para la Humanidad. Homenaje a Edgar Morin.

Durante cuatro días esta actividad reunió a investigadores y profesores de distintos países para compartir sus opiniones acerca del abordaje de problemas desde una visión del pensamiento complejo, teoría ideada por Edgar Morin.

La última mesa de diálogo del seminario fue encabezada por el propio Morin, quien desde Montpellier, Francia, se unió por medio de una videoconferencia a la investigadora Sabah Abouessalam-Morin; Felipe Alatorre Rodríguez, profesor del Centro Interdisciplinario de Vinculación y Formación Social (Cifovis) del ITESO; Miguel Bazdresch, investigador de la Coordinación de Innovación, Desarrollo y Exploración Académica (CIDEA); Leonardo Rodríguez Zoya, profesor de la Universidad de Buenos Aires y fundador de la Comunidad de Pensamiento Complejo, y a Enrique Luengo González, profesor del Cifovis, quien moderó el encuentro en el Auditorio M del ITESO.

El filósofo francés, reconocido el pasado 29 de octubre con el Doctorado Honoris Causa otorgado por el Sistema Universitario Jesuita (SUJ), afirmó durante el diálogo que uno de los desafíos para la educación es que, si bien las instituciones están estructuradas para separar el saber en diversas disciplinas, "debemos notar que los más grandes descubrimientos y las ideas más importantes no llegan desde una sola disciplina, sino desde la multidisciplinariedad", acotó, haciendo alusión a la teoría del Pensamiento Complejo de la cual es autor.

En un mensaje previo, relativo al futuro de la humanidad, la socióloga urbanista Sabah Abouessalam-Morin señaló que resulta imprescindible que las fracturas espaciales no se conviertan en fracturas sociales. "Una ciudad humana para mañana debe escribirse en un proyecto de humanización de los territorios que importe, en primer lugar, a la instalación de un gobierno urbano participativo, que contribuya a promover la idea de una ciudad para todos y cada uno, independientemente de su ingreso, sexo, edad, raza o religión, para participar de las posibilidades que la ciudad ofrece", mencionó.

_{Sabah Abouessalam-Morin y Enrique Luengo participaron en la mesa de diálogo de clausura del seminario.}

Consideró también que los sistemas de asistencia se han estancado en un estado de "pretensión" de una lucha eficaz contra la pobreza urbana, lo cual deviene en el reto de desarrollar y regenerar el vínculo social.

"Tenemos que trabajar por religarnos entre nosotros al interior de nuestras comunidades, para hacer de nuestras diferencias éticas, raciales, culturales, económicas, una riqueza y no un empobrecimiento. Se trata de trabajar por un nuevo paradigma, por un nuevo estilo de pensar que […] debe ser considerado como una oportunidad para el porvenir de la humanidad. Debemos hacer de estas propuestas una manifestación de nuestro compromiso común, para que el próximo milenio sea más digno, más justo y más humano", asentó quien también es cónyuge de Morin.

Citando los "Cantares" del español Joan Manuel Serrat, los cerca de cien asistentes se unieron golpe a golpe y verso a verso en una serenata improvisada que llegó hasta Montpellier, Francia, desde donde se encontraba Edgar Morin, para finalizar las cuatro jornadas del seminario.