Una perspectiva de la complejidad del cambio climático

Judith Morán

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) argumenta que no hay estudios que prueben la relación entre la contaminación del río Santiago y las enfermedades que aquejan a la población cercana a su cauce, afirmó Mario López Ramírez, académico del Centro de Investigación y Formación Social (CIFS) del ITESO, quien destacó que en la encíclica del Papa Francisco se establece dicho vínculo cuando aborda el tema del agua.

En el conversatorio "Perspectivas sobre la encíclica del Papa Francisco", que fue la segunda actividad dentro del foro Laudato si': de la indiferencia al cuidado de la casa común, López Ramírez señaló que en el texto del Pontífice se abordan temas del consumo, gasto, explotación y calidad del agua.

"Aquí se detiene en algo, no sólo señala que el problema no es la mala calidad del agua, sino la escasez de agua de calidad. Tenemos agua, pero contaminada. Hay poca agua de calidad sobre todo para los pobres", indicó el académico.

El profesor de la asignatura "Ecología política y geopolítica" considera que la encíclica, además de establecer la relación entre la contaminación del agua y la salud pública, abre el diálogo no sólo a los expertos, "los gestores del agua siempre están anquilosados en que lo saben (todo) y que los que no saben no tienen por qué meterse", dijo.

_{David Velasco, SJ, Laura Velázquez López, Elba Castro Rosales, Mario López y Arturo Navarro.}

Elba Castro Rosales, educadora ambiental y académica de la Universidad de Guadalajara (UdeG), afirmó que la encíclica es un documento didáctico, puesto que explica la complejidad del calentamiento global, y además "es ejemplar la forma en que lo científico, lo cultural y lo espiritual, lo personal y lo humano están dialogando en este discurso".

Aunque reconoce como un avance que en el documento se hable de la necesidad de una educación ambiental, la académica señala que el concepto se queda en el cambio de conducta.

"No hace referencia a la profundidad de pensamiento de lo que debe reformarse sino a cambiar las conductas y me parece un concepto reduccionistas de la propia educación que también ayudaría a reformar el espíritu", advirtió durante su participación en la actividad con la que el CIFS celebra su vigésimo aniversario, y que es coorganizada por el Centro Universitario Ignaciano (CUI).

Revolución en marcha

"Lo que está ocurriendo nos pone ante la urgencia de avanzar en una valiente revolución cultural", afirma el Papa Francisco en la encíclica. Esta revolución ya se está dando, afirmó David Velasco, SJ, académico del Departamento de Estudios Sociopolíticos y Jurídicos, durante su participación en el foro llevado a cabo el 26 de agosto en la terraza de la Biblioteca Dr. Jorge Villalobos Padilla, SJ.

"Las luchas por la defensa de la tierra y el territorio de innumerables pueblos originarios llevan rato desarrollándose, las guerras contra las mineras canadienses ya se están dando y se han ganado, ya expulsaron a muchas mineras en Ecuador, en Argentina, en muchos lugares", ejemplificó.

A la pregunta de por dónde comenzar esta revolución cultural a la que llama el Sumo Pontífice, Velasco respondió que es necesario "tomar conciencia de lo que está ocurriendo y lo que está ocurriendo es bastante más grave de lo que suponemos, el Papa lo llega a afirmar: nunca antes la humanidad había tenido en demasiadas pocas manos la posibilidad de destruir el planeta".

El jesuita dijo que parte del problema es que se sigue creyendo que aunque la gente teme a los desastres naturales, confía en que será una solución tecnológica la que resolverá el problema.

En la publicación Debate Social, editada por el ITESO, se aborda el tema de la encíclica. Además, Buena Prensa, la editorial de la Compañía de Jesús, hizo una edición de la encíclica Laudato Si´ que puede conseguirse en la Oficina de Publicaciones (Edificio W) en el ITESO.

En la actividad también participaron Arturo Navarro Ramos, jefe del CUI,  y Laura Velázquez López, Integrante del Programa de Ecología Política del CIFS.